“En el día de hoy
voy a referirme al día del patrimonio que se llevara a cabo como todos los años
en el Uruguay entero en el mes de octubre. Estando en el ejercicio como Edila
tuve la satisfacción de volar la venia al in Intendente para que obtuviera a
través de la compra, el inmueble sito en calle Penza casi 18 de Julio la
llamada casa de Penza la familia dejó dentro de la casa parte del mobiliario y
el consultorio del Dr. para que los duraznenses tuviésemos esa riqueza que fue
guardada por años, para que luego lo mostremos con orgullo a quienes nos visitan
y para mostrar a otras generaciones. Penza dejó en Durazno su huella en
diferentes lugares de la ciudad actual Casa de la Cultura, la casa de Penza y
el recreo de Penza que se situó en la manzana donde hoy se encuentra la escuela
Nro. 10 y el Jardín de infantes Nro. 87 cuyo frente luce imponente la entrada y
un trozo de la reja que rodeaba el recreo. Tenía especies de plantas traídas de
Europa pero lamentablemente eso desapareció por inoperancia e insensatez de
quienes gobernaban en ese momento. Fue un hombre visionario y todo lo que queda
en Durazno de lo que le perteneció muestra un gran amor por cada infraestructura
que creó, un exquisito conocimiento de lo arquitectónico y una profunda sensibilidad
por el arte. En el período pasado se destinó un dinero que permitió que el
público pudiese visitar y admirar la casa y su mobiliario aunque mucho falta
para restaurarlo como correspondería. El 5 de octubre salimos de recorrida en
el día del patrimonio y sin dudas esta casa era un destino obligado. Llevaba
conmigo un turista que iba por primera vez. Nunca pasé tanta vergüenza porque
antes de entrar le había hecho mención de la belleza que iba a ver. Entramos y
nos recibió con total amabilidad la funcionaria que estaba a cargo. Luego de
recorrer el hall central, observé que el pasillo que conduce al baño que
atesora el water de un millón de euros, estaba tapado por una estiba de cajas
tipo depósito. Cuando preguntamos para ver el tal preciado objeto, nos dijeron
que estaba cerrado con llave. Luego nos dirigimos al patio y las caballerizas,
el pastizal tapaba todo. Hacía mucho tiempo que no se barría porque estaba
lleno de hojas que caen en otoño. La entrada a las caballerizas que tiene en
calle Rivera estaba cerrada pero visto por dentro había bolsas de consorcio
llenas de hojas del barrido como se ve en las fotos. En el recorrido hacía esa
puerta lucía una gran cloaca con la tapa partida y totalmente descubierta con
el peligro que eso significa.
Cuando salíamos con la desazón que nos produjo el
panorama, llegamos a un atril donde reposaba un cuaderno común al que le habían
escrito con marcador negro día del patrimonio con solo tres personas habían
puesto sus comentarios que como se ve en las fotos decían muy descuidado,
debería estar más abierto será porque los fines de semana está cerrado. Lo
bello no se muestra. Le falta cuidado, etc. Es doloroso que quienes están en el
ejecutivo para gestionar y cuidar de nuestro patrimonio y los inmuebles de los
duraznenses sean tan insensibles, y que quién represente a la cultura no tengan
la capacidad y el conocimiento necesario para saber que un inmueble de esas características
tiene que tener un cuidado diario para mantenerlo de la mejor manera hasta que
llegue el momento de su efectiva restauración. Por otra parte están los valores
que trasmitimos los adultos, ale] se imparten clases de música a niñas y niños
como así también es escenario de obras de teatro. Pregunto... ¿Se perdieron los
valores? ¿Quiénes son responsables de esto?.”
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