PLANTEO 1/11/2013
“Hoy quiero
recordar al “Pelado” Bozzano, Julio Bozzano. Hoy quiero referirme a él como una
gran persona que fue, que peleó como tantos y tantas por tener una sociedad más
justa en la cual muchos de nosotros seguimos luchando y avanzando. Dejó su
escuela, su semilla plantada en cada uno de nosotros que pensamos y creemos en
ese sueño de justicias social. Quedará en nosotros los recuerdos, lindos
momentos de charlas y largas discusiones de política en que nos hacía
reflexionar con su pensamiento. Recuerdos los cuentos de las batallas ganadas
en el penal, batalla entre el atropello y el intelecto, batallas ganadas a un régimen
torpe que lo tuvo enjaulado 14 años. Qué lindo verle el brillo en los ojos, la
cara y la risa que le brotaba desde lo más profundo. Y escucharan el cuento de
la vaca negra que no tiene chinchulines, el percutor del Mayor, esos cuentos
nos hacían ver cuanta torpeza había en sus captores. Todo eso quedó en anécdotas,
sólo los grandes pueden hacerlas después de pasada esa tormenta saliendo con la
frente en alto sin rencor y con la fuerte convicción de construir un mundo
mejor. Siguió trabajando en lo social, no en política partidaria, sino que eligió
el fútbol y desde la Liga y OFI hizo también su trabajo defendiendo el fútbol
chacarero, el del interior, donde lo supo ver el pueblo de Durazno vistiendo la
9 de Racing, su querido cuadro, y la 9 de la roja del Yí en su juventud. Y
luego como ya lo dije fue dirigente y se transformó también ahí en un grande. Y
de más está decir de su paso como Profesor y Director del Liceo Dr. Miguel C.
Rubino y allí también supo dejar bien en alto su prestigio. Todas esas
instancias lo dejaron muy bien parado en su paso por la vida y hoy estamos
recordando su partida. Se fue el “pelado” y también se fue como un grande sin
muchos pamentos y sin pavadas, sin buscar protagonismo, calladito se fue.
Posiblemente el la prefirió así a su partida, la quiso así porque él era así,
siempre construyendo y construyendo sin buscar protagonismo. Hoy tenemos que
mirar la vida del “pelado” y aprender a no ser bocón y construir y no buscar
protagonismo y construir y construir. Gracias “Pelado” por todo, por lo que
fuiste y por lo que serás, porque quedate tranquilo, tu semilla con tus valores
quedó bien plantada entre nosotros”.
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